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En este caso les traemos un nuevo artículo de la Revista Científica ANMAT: Caracterización de la población adulta mayor, hábitos alimentarios y su relación con las enfermedades transmitidas por alimentos.
Se trata de una revisión bibliográfica realizada por profesionales del Hospital General de Agudos Carlos G. Durand y del Instituto Nacional de Alimentos (INAL), en la cual se destaca la importancia de las buenas prácticas de inocuidad alimentaria, especialmente en personas mayores, caracterizadas como grupo de riesgo.
El objetivo del presente trabajo fue describir los cambios fisiológicos asociados al envejecimiento, hábitos alimentarios, conocimientos, actitudes hacia la inocuidad de los alimentos, el uso de las prácticas recomendadas de manipulación y consumo de alimentos seguros por parte de personas mayores.
A continuación les presentamos la introducción y el enlace para la consulta y/o descarga del artículo completo.
Introducción
Las Enfermedades Transmitidas por los Alimentos (ETA) constituyen un importante problema de salud a nivel mundial. Son el resultado de la ingestión de alimentos (productos alimenticios o ingredientes, especias, bebidas o agua) contaminados con microorganismos patógenos o productos químicos, en cantidades tales que afectan la salud del consumidor en forma aguda o crónica, a nivel individual o grupal. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2010 se produjeron alrededor de 600 millones de casos y 420.000 muertes a causa de ETA en todo el mundo. Las estadísticas elaboradas por el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Transmitidas por Alimentos indican que prácticamente el 40% de los brotes de ETA reportados en la Argentina ocurren en el hogar[1].
Las prácticas inadecuadas en los hogares en cuanto a preparación, almacenamiento y conservación de los alimentos pueden predisponer el riesgo ante una ETA en adultos mayores debido a su baja resistencia a las enfermedades. En estos casos, las precauciones deben extremarse ya que sus consecuencias pueden
ser severas, dejando secuelas o hasta incluso provocando la muerte. Por lo tanto, recabar información sobre este tema puede permitir el abordaje en intervenciones de educación sobre inocuidad alimentaria que contribuyan a promover el conocimiento y la conciencia por parte de este grupo etario.
El objetivo del presente trabajo fue describir los cambios fisiológicos asociados al envejecimiento, hábitos alimentarios, conocimientos, actitudes hacia la inocuidad de los alimentos, el uso de las prácticas recomendadas de manipulación y consumo de alimentos seguros por parte de personas mayores.
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